Un legislador masista sostiene que el tributo debe ser debatido con los productores.
El presidente de la Comisión de Tierra y Territorio de la Cámara de Senadores y exdirigente cocalero, Julio Salazar, señaló este viernes que incluir un impuesto a la coca en la futura ley general sobre este cultivo debe pasar primero por un debate entre los productores.
“Eso hay que discutirlo, por eso en algún momento nos vamos a reunir como cocaleros para discutirlo, pero yo quiero decirles que históricamente se ha contribuido como productores de la hoja de coca, en la aduana, donde se pagaba, el 50 por ciento iba al Estado y el otro 50 por ciento para obras sociales, siempre hemos contribuido los cocaleros, pero en este momento mucho nos satanizan”, sostuvo el senador.
Asimismo, señaló que antes de pensar en un impuesto, se tiene que esperar los resultados del estudio integral de la hoja de coca para conocer la variación de las áreas de cultivo.
“Ustedes saben, el INE (Instituto Nacional de Estadística) ha hecho un estudio integral de la hoja de coca, sobre el tema del consumo, sobre el tema de la productividad y seguramente a su debido tiempo vamos a discutir”, aseveró el legislador.
Salazar aclaró que el Gobierno aún no puede emprender proyectos para industrializar la “hoja sagrada” por la penalización que existe a nivel internacional con la Convención de Viena.
oposición. Anteriormente, los parlamentarios de la oposición coincidieron en solicitar al Gobierno que ponga en ejecución un impuesto por la venta y el cultivo de hoja de coca que existe en varias regiones del país, por considerar que éste es el único sector que no contribuye al país en el rubro impositivo.
Una de las bases para lograr este propósito debería ser un estudio de mercado, además de ejercer un control efectivo de las excesivas plantaciones de coca que incrementaron en los últimos años de acuerdo con informes del Viceministerio de la Coca.
Según los datos del registro estatal, el número de cocaleros supera los 42.000 cultivadores, de los cuales, alrededor de 35.000 pertenecen a los Yungas paceños y siete mil al trópico cochabambino; cada uno de ellos tiene un ingreso trimestral promedio que bordea los 12.000 bolivianos por concepto de venta de la cosecha de un cato de coca.
48 mil bolivianos son los ingresos anuales de los productores de coca.
“Es prudente que se haga un impuesto a la coca, porque sabemos que es un producto que se está vendiendo en todo el país”.
Luis Felipe Dorado / DIPUTADO CN
Socio y fundador de boliviaimpuestos.com. Autor de artículos tributarios, investigador y consultor.
Especializado en la asesoría, planificación y defensa más compleja en materia tributaria.
